Ataques de Pánico o Crisis de
Angustia
Diferencias y
concordancias
Hoy en día por sobre todo en
Buenos Aires, una sociedad tan estresada, competitiva y
vertiginosa, genera en muchos de sus habitantes una sintomatología
que se manifiesta con un miedo aterrador, una sensación de vacío y
una carga de angustia tan fuerte, capaz de lograr en la persona, una
reclusión en su hogar y con serias dificultades
para enfrentarse al medio social donde se desenvuelve.
Un temor desmesurado,
desgarrador con miedo a la muerte, desarrolla en la
conducta, una sensación desesperada que lo induce a
abandonar la situación donde ésta se manifiesta para encontrar paz.
Este fenómeno que es común y se
reconoce con mayor asiduidad en este medio, es lo que llamamos un
Ataque de Pánico.
Para nuestro modo de ver la
cosa, hay que hacer una clara diferencia de lo que se entiende
como un ataque de pánico y una crisis de angustia.
Si bien el Ataque de Pánico es en
sí mismo una crisis de Angustia, radica una diferencia muy marcada
entre ambas manifestaciones.
Cuando la persona siente una
necesidad imperiosa y desesperante en abandonar el escenario donde se
encuentra, por un miedo irracional y aterrador, sin lugar a dudas
estamos en medio de un paciente con un Ataque de Pánico.
Manifestaciones
clínicas
- Palpitaciones en el pecho: El paciente siente una alta carga de angustia, se comprime la caja toráxica y confunde este dolor con una afección cardíaca, capaz de producirle un miedo a morirse.
- Taquicardia: Debido a su alto grado de angustia, siente alteraciones en la frecuencia cardíaca, por lo que se incrementan más sus temores de padecer un problema cardíaco severo.
- Sudoración Abundante: Que se manifiesta fundamentalmente en las axilas, en las manos y en los pies, produciendo una molestia en el afectado, que recae en la relación con otras personas, donde termina por alejarse de los ámbitos sociales.
- Sensación de Ahogo: Un alto componente de angustia le produce una contracción en la glotis y el paciente siente un fuerte síntoma de ahogo “Un nudo en la garganta.”
- Mareos y Nauseas: Que son otras de las manifestaciones clínicas de este tipo de afecciones.
- Parestesias: Se manifiesta un cuadro de hormigueos en las extremidades inferiores y superiores.
Etiología
El origen de este tipo de
trastornos, los debemos buscar en situaciones que produzcan un
alto grado de estrés por una sobrecarga laboral, económica o
profesional.
La muerte de un ser querido,
produce varias veces un componente importante de estrés y
puede desencadenar en un Ataque de Pánico.
Los conflictos de pareja o
familiares son también posibles de producirlos.
Personas que son afectadas
por grandes exigencias, obviamente son proclives a padecerlos,
fundamentalmente si tienen un poco índice de tolerancia a
frustraciones.
Tratamiento
De acuerdo a la magnitud y
severidad de este cuadro clínico, es necesario acompañarlo con
medicación farmacológica.
Son trastornos que tienen un
buen pronóstico de recuperación y el hilo conductor de su
tratamiento es la psicoterapia que se encargue de ayudar al paciente
a bajar sus exigencias, acompañarlo a sobrepasar su crisis a nivel
individual y emocional junto a su bagaje histórico donde pudo
haberse originado su conflicto.
Es importante que durante el
tratamiento, el paciente tenga conocimiento que pueden existir
recidivas hasta poder abordar un mejor equilibrio de tolerancia
a frustraciones, disminuir su nivel de ansiedad y bajar sus
exigencias.
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